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Grosor del tobillo

¿Cómo medirlo?

¿Cómo evaluar la morfología del tobillo?

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El tobillo puede ser fino, medio o regordete.

tobillo fino: Es casi enteramente "hueso" con poca carne alrededor del hueso.

Tobillo medio: Presenta un equilibrio entre hueso y carne, sin pliegues marcados ni exceso de volumen.

tobillo regordete: Suele presentar pliegues y poca diferencia de volumen con la parte inferior de la pantorrilla, pareciendo más robusto y carnoso.

Observar estas características te ayudará a elegir un calzado adaptado a la forma del cuerpo de tu hijo (o al tuyo).

Grosor empeine

¿Cómo medirlo?

¿Cómo evaluar el empeine?

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Consejos para medirlo correctamente:

Comodidad ante todo: Asegúrate de que la cinta métrica esté ajustada pero no apretada. Deje un pequeño espacio para asegurarse de que los zapatos no le aprieten cuando su hijo camine o corra.
Comparar con ambos pies: Al igual que con el largo y el ancho, es bueno medir ambos pies, ya que pueden diferir ligeramente en tamaño.

Usando medidas:

Elección de zapatos: Utiliza estas medidas cuando consulte nuestra guía de tallas o solicite asesoramiento sobre zapatos específicos, como botas altas o zapatos con tiras, que requieren un buen ajuste alrededor del empeine y el tobillo.
Reevaluación periódica: Los pies de los niños crecen rápidamente. Recomendamos medir la parte superior del pie y el tobillo cada 6 meses para garantizar un ajuste continuo de los zapatos.

Medidas

Tu hijo tiene pies finos

Su hijo tiene pies medianos

Tu hijo tiene los pies anchos

Como medir

¿Cómo medir los pies de nuestros peques?

Medir el pie de tu hijo es un paso esencial para elegir la talla de zapatos correcta, asegurando comodidad y soporte a medida que crece. Sigue estos simples pasos para medir los pies de tu hijo en casa como todo un experto.

Ayúdame a elegir

También te aconsejo que leas la página "la talla correcta" para todas las explicaciones sobre cómo tomar medidas y elegir la talla más adecuada para tu hijo.

Nivel de motricidad

Los niveles

Nivel de motricidad

Nivel 1

Nivel 2

Nivel 3

Nivel 4

Nivel 5

Nivel 1

No camino

Si tu peque aún es un bebé, desde que nace hasta el momento en que pueda ponerse de pie, está en el nivel 1. A esta edad, es demasiado pequeño para llevar zapatos. Sin embargo, puede necesitar patucos o zpatitos suaves y blanditos para proteger sus pies del suelo, del frío o del sol. Los zapatitos deben ser flexibles y cómodos para no obstaculizar sus movimientos naturales. Siempre que sea posible, déjalo descalzo, ya que es lo ideal para su desarrollo.

Nivel 2

Me pongo de pie y camino con apoyo

¡Y alehop! ¡Tu bebé ya es capaz de ponerse de pie utilizando todos los apoyos posibles! Míralo como se sujeta al sofá o se agarra a tus piernas. Empieza a dar pasitos de lado al estilo cangrejo e incluso puede caminar empujando una silla o un cochecito. Al final del nivel 2, será capaz de ponerse de pie sin sujetarse y de dar algunos pasos sin ayuda. Todavía es demasiado pronto para ponerle zapatos, pero unos zapatitos o patucos flexibles son perfectamente adecuados. Algunos modelos tienen suelas diseñadas para caminar al aire libre, ofreciendo protección y libertad de movimiento.

Nivel 3

Camino solo/ y sin ayuda

En esta etapa, tu hijo camina sin ayuda, tanto dentro como fuera de casa al aire libre. Es el momento adecuado para empezar a ponerle zapatos para proteger sus pies de superficies hostiles, ya que ya no puedes vigilar por dónde camina. Al principio, su forma de andar puede ser un poco vacilante, pero en unos meses ganará confianza, empezará incluso a correr y a chutar un balón, aunque de manera todavía torpe. Usa los brazos para mantener el equilibrio. Sube las escaleras a cuatro patas y luego de pie, sujetándose. Permanecerá en este nivel de motricidad durante varios meses, así que no tengas prisa. Cuando tenga suficiente equilibrio para no tropezar, pasará al nivel 4.

Nivel 4

Camino sin tropezarme

Casi casi como un niño mayor. Si lo comparas con niños más grandes, todavía no tiene la misma capacidad de movimiento. Le encanta correr, girar, bailar, y sus reflejos le ayudan a no tropezar con el más mínimo obstáculo. Su forma de andar se ha vuelto más fluida y equilibrada. Va en bici sin pedales, patinete, y cada vez apunta mejor con un balón. ➡️ Una buena prueba para comprobar si ha encontrado su equilibrio es colocar una barra justo por debajo de sus rodillas y ver si es capaz de pasarla sin sujetarse ni caerse. ¡Cuántos progresos en pocos meses! Permanecerá en este nivel de motricidad hasta aproximadamente los 4 a 6 años, dependiendo del niño.

Nivel 5

Soy todo un experto

Tu hijo es ahora un verdadero experto en motricidad. Sube y baja las escaleras corriendo, trepa por muros o árboles, salta a la comba y monta en bici (¡sin ruedines, por supuesto! ¡Ya es mayor!). Le encanta moverse y se siente realmente cómodo. Sus pies se han osificado y musculado, dándole gran potencia en las piernas y un excelente equilibrio. ¡Está listo para explorar el mundo con una confianza y agilidad notables! Sigue poniéndole zapatos que acompañen los movimientos de sus pies: suelas flexibles, ligereza, y una forma que se adapte a su morfología. Aunque ya es mayor, su crecimiento aún no ha terminado. 😉