• Envío gratuito a partir de 49€
  • Envío en 24 horas - Envío gratuito a partir de 49€
  • Envío gratuito a partir de 49€
  • Expedido en 24 horas

Mi carrito

Vacío
Tu carrito está vacío
Ayúdame a elegir
1
2
3
4

Hey, dime ¿cómo te mueves?

La motricidad de mi hijo.

Encontrar el par adecuado

¡Vamos a medir los pies juntos para encontrar el par perfecto!

Mira el tutorial haciendo clic a continuación

¡La diferencia entre las medidas es demasiado grande! Comprueba las medidas y mira el tutorial

Pie izquierdo

Largo del pie

cm

Ancho del pie

cm

Pie derecho

Largo del pie

cm

Ancho del pie

cm
Etapa anterior
Ver el video
Etapa siguiente

¿Cómo es tu tobillo?

El grosor de los tobillos

Etapa anterior
Etapa siguiente

Ya casi está, ¡el empeine del pie también es importante!

El grosor del empeine

Etapa anterior
Etapa siguiente

¡C'est fini!

Encontramos estilos que se adaptan a tus pies pequeños.

Breve resumen

Volver a empezar
Página principal

Nuestro blog

Sandalias bebé: ¿es una buena o mala idea?

Sandalias bebé: ¿Es una buena idea?

Con la llegada del verano, llega el momento de dejar respirar los pies del bebé. Así que empiezas a pensar en comprarle unas sandalias monas. Pero entonces, ¿qué necesitan sus piececitos? ¿Qué zapatos son adecuados y cuáles no? Para ayudarte a elegir bien, en Petits Pas de Géant te explicamos cómo es una buena sandalia para bebé.

Las sandalias adecuadas para bebé

Parte superior ventilada: los zapatos deben estar abiertos en la parte superior para permitir que los pies respiren bien. ¡Especialmente los bebés que tienden a sudar mucho! Además, puedes encontrar todos nuestros consejos para los pies sudorosos en nuestro artículo:

Lados y puntera protegidos: los niños que aún no son expertos en motricidad necesitan tener sus pies protegidos. ¡Esto es muy importante para evitar pupas en los dedos y que la tierra o piedras entre en el zapato! Los bebés, al tener una capa de grasa bajo los pies, sienten las piedras mucho menos que nosotros. Por lo que no siempre nos dirán si se les ha metido una piedra en el zapato.
Por eso las marcas buenas de calzado para niños crean sandalias abiertas sólo en la parte superior.

¡Y aún mejor cuando la suela que sube por la parte delantera o una puntera reforzada de goma! Así, las sandalias son más resistentes a los roces causados por el gateo, el tacataca, la bici de equilibrio, y las actividades en el parque...

Si las sandalias que lleva tu bebé cumplen con estos criterios, entonces has hecho una buena elección.

Qué evitar a toda costa

Si las ves en un escaparate, en una tienda o en internet, ¡huye! Para los piececitos de vuestros bebés ni lo penséis. En cualquier caso, puedes estar seguro/a de que nunca los verás en nuestra web.

Dedos de los pies expuestos: ¡no es OK!


¿Alguna vez has visto a un niño pequeño caminar y jugar? Se arrodilla, se tumba, salta, sube los escalones del tobogán... En su bici de equilibrio o en cochecito, empuja o frena con la parte delantera de los pies... Si sus sandalias tienen la puntera abierta, son los dedos los que rozarán el suelo. ¡Qué dolor!

Cada año, en urgencias ven uñas rotas y lesiones que requieren poner puntos. No es bonito de ver, pero puede pasar. Para evitarlo, a la hora de jugar, los niños deben utilizar sandalias con la puntera cerrada. Las sandalias abiertas deben reservarse para actividades tranquilas: ir a comer fuera de casa, compras, etc. No pueden ser el único calzado para el verano y deberían prohibirse en los parques.

Sandalias estrechas de plástico: ¡tampoco es OK!


Están lejos de ser cómodas porque su material roza los pies.
Además, ¡a menudo llevan contrafuertes! Esto se debe evitar porque cambia el centro de gravedad del bebé, es decir la forma en que su cuerpo encuentra el equilibrio. Su forma de caminar también será diferente al llevar contrafuertes. El cuerpo se inclina hacia delante y son los tobillos, las rodillas y la espalda las que compensan. ¡Esto causará un dolor que un cuerpo pequeño y que está creciendo no debería experimentar!

Suelas grandes: ¡aún peor!


No se pueden doblar y son demasiado gruesas y pesadas ​​para los pies y la espalda de los niños pequeños. Aprenderán a arrastrar los pies y esto les provocará dolores de espalda... Además, también pueden hacerse daño en los dedos de los pies con este tipo de zapato abierto.

Chanclas o pinkis: ¡prohibidas!


Es una gran señal de WARNING que nos gustaría poner en plena página de la web para que entendáis que no se deben poner chanclas en los pies de un bebé. No tienen nada bueno... Los zapatos no les paran bien en los pies, tropiezan y se ven obligados a tensar los pies para que no se les caigan. Los dedos de los pies corren peligro. ¡Y por supuesto, ¡no son respetuosas!

Hemos creído necesario e importante hacer este artículo sobre las sandalias para los más peques. Ahora ya sabes qué tipo de zapatos elegir para tu bebé. Abierto por arriba, protegido por los lados y por delante, ¡y muy flexible por supuesto!

¡No dudes en compartir nuestro artículo con todos los padres que busquen las sandalias adecuadas y advertir sobre malas prácticas!