¿A qué edad empiezan a camina los niños?
Comprender cómo los bebés aprenden a caminar
Probablemente te estés preguntando a qué edad camina un niño, sobre todo si tu pequeño está empezando a ponerse de pie y explorar su entorno.
No te preocupes, cada niño se desarrolla a su propio ritmo. Algunos se centran en las palabras y en el habla desde temprano, mientras que otros desarrollarán habilidades motoras, como caminar .
Este aprendizaje requiere mucha energía, y es raro que un niño progrese rápidamente en ambas áreas al mismo tiempo.
En este artículo, te explicamos los pasos hacia la marcha autónoma, cómo apoyar a tu hijo y las situaciones en las que el asesoramiento profesional puede resultar útil.
La etapa clave del desarrollo motor
¡Caminar es un gran momento en la vida de tu peque! Estos primeros pasos simbolizan su entrada en una nueva fase de autonomía. Pero detrás de este momento mágico hay mucho trabajo: fortalecer los músculos, encontrar el equilibrio e incluso superar el miedo.
A menudo se dice que un niño empieza a caminar alrededor de los 12 meses, pero existe una gran variación. Como explica la osteópata Solène Chavane, especializada en pediatría: “Hay niños que se levantan muy temprano y que tardan en coger confianza para caminar”. (Fuente: Journal des Femmes
Las etapas de la marcha desde que nacen hasta los 18 meses
La marcha autónoma no ocurre de la noche a la mañana. Antes de dominar esta hazaña, los bebés pasan por diferentes niveles de habilidades motoras: sostener la cabeza en alto, girar, gatear y, finalmente, caminar a cuatro patas . Según un artículo de sciencedirect.com , el inicio de la marcha independiente se produce entre 11 y 15 meses de media.
Los bebés sólo adquieren una marcha madura alrededor de los 5-6 años de edad (Okamoto y Kumamoto, 1972; Cavagna et al., 1983), es decir, después de 4 a 5 años de caminar de forma independiente.
(Fuente: Estudio y análisis del periodo de adquisición de la marcha en niños. Aportaciones desde la neurociencia cognitiva y conductual. )
Sin embargo, es normal que algunos comiencen a los 10 meses, mientras que otros tardan hasta 18 meses en comenzar.
Variaciones de edad a la hora de aprender a caminar
Cada niño sigue su propio ritmo. Los factores que influyen en la marcha son variados: el peso , la fuerza muscular o incluso el temperamento del niño. Algunos pequeños curiosos prefieren explorar gateando durante más tiempo, mientras que otros pasan directamente a caminar.
Las diferentes etapas antes de caminar de forma independiente
Antes de caminar de forma autónoma, un niño pasa por varias etapas esenciales que preparan su cuerpo y su equilibrio.
Desde arrastrarse hasta caminar a gatas, estas fases de movimiento son fundamentales para fortalecer sus músculos y desarrollar su coordinación. Cada progresión contribuye a llevarlo hacia sus primeros pasos.
El desarrollo motor de un bebé sigue una progresión fascinante, guiada por la maduración de su sistema nervioso central (SNC). A medida que crece, los músculos de su cuerpo se controlan voluntariamente en un orden específico, desde la parte superior hasta la parte inferior del cuerpo. Estas son las principales etapas de este proceso:
Sostener la cabeza
Primero, el bebé aprende a controlar los músculos del cuello. Esto le permite mantener la cabeza erguida, un paso esencial para explorar su entorno e interactuar con el mundo.
Sentarse
Luego, el control se extiende a los músculos del tronco y la pelvis. Con esta coordinación adicional, el bebé puede sentarse solo y empezar a jugar en esta posición estable.
Ponerse de pie
Finalmente, el control llega a los músculos de las piernas, lo que permite que tu bebé se ponga de pie. En esta etapa gana el equilibrio y la fuerza necesarios para prepararse para dar sus primeros pasos.
Así es como los bebés desarrollan acciones complejas, como gatear, caminar o correr.
Cada etapa prepara la siguiente, hasta alcanzar la autonomía en sus movimientos.
Formas de desplazarse antes de caminar.
Antes de caminar, cada niño encuentra su propia forma de moverse. Tal vez a su bebé le guste gatear para atrás (¡sí, a veces pasa!. Estas formas de movimiento no sólo son graciosas: preparan su cuerpo para el esfuerzo de caminar
De la marcha asistida a la marcha independiente
Cuando tu hijo comience a ponerse de pie, a menudo buscará tu mano para tranquilizarse. Esos momentos en los que se aferra a ti o a un mueble son preciosos. Marcan el inicio de la marcha asistida, un paso imprescindible antes de que se lance, orgulloso como todo, a la marcha independiente.
Equilibrio y desequilibrio al caminar
Cuando los bebés aprenden a caminar, no se limitan a poner un pie delante del otro. También deben dominar el equilibrio dinámico, es decir, una transición constante entre dos estados de equilibrio.
¿Qué es el equilibrio dinámico?
Imagínate un equilibrista sobre un alambre. Pasa constantemente de un pequeño desequilibrio a otro para avanzar manteniendo su estabilidad. Para un aprendiz de caminante, es un poco lo mismo. Cada movimiento provoca una fase de desequilibrio, que el niño debe corregir rápidamente para evitar caer. Estos ajustes constantes constituyen el equilibrio dinámico.
¿Por qué caminar es un desafío?
Al caminar, hay un momento en el que todo el peso del cuerpo descansa sobre un pie (esto se llama apoyo monopodal ). Esto reduce significativamente la superficie de apoyo y dificulta el mantenimiento de la estabilidad.
Se necesita tono muscular
Para mantener esta posición, el bebé debe desarrollar suficiente tono muscular en sus piernas. Este tono es fundamental para soportar el peso del cuerpo y ajustar rápidamente tu postura.
Coordinación compleja
Además de la fuerza, el niño debe aprender a coordinar los movimientos de sus músculos y gestionar las fuerzas externas, como la gravedad o los desniveles del terreno. Estacoordinación es un proceso de aprendizaje gradual.
Caminar es un aprendizaje progresivo
A base de intentos, los niños desarrollan su equilibrio dinámico. Se vuelven cada vez más expertos en gestionar estas fases de desequilibrio transitorio, hasta que caminar se convierte en una actividad natural y fluida.
¿Cómo ayudar al bebé a aprender a caminar?
Ayudar a tu bebé a aprender a caminar requiere gestos sencillos y afectuosos. Fomentar sus movimientos, ofrecerle un entorno seguro y adaptado, así como fomentar hábitos como caminar descalzo son las claves para apoyarle en sus primeros pasos.
La importancia del desarrollo muscular y las habilidades motoras
Caminar depende de músculos fuertes y una buena coordinación. Anima a tu hijo a trepar, gatear y jugar en el suelo. Estos momentos de movimiento, aunque parezcan triviales, fortalecen su motricidad y su desarrollo muscular.
A muchos niños les encanta empujar carritos o objetos ligeros por casa. Este sencillo juego les ayuda a desarrollar el equilibrio y la confianza, mientras preparan su cuerpo para caminar. Es una actividad divertida y efectiva.
El movimiento libre
El movimiento libre también son una excelente manera de apoyar su desarrollo. Por ejemplo, deja que tu hijo se mueva sobre una colchoneta o en un espacio seguro, sin ponerlo nunca en un taca-taca ni sentarlo sistemáticamente.
Déjalo explorar, rodar, intentar ponerse de pie o incluso gatear a su manera. Estas experiencias les ayudan a descubrir sus capacidades a su propio ritmo, al tiempo que fortalecen su autonomía y confianza en sí mismos. Una simple alfombra de juego o un rincón en el suelo pueden ser suficientes.
¿Por qué fomentar que tu hijo camine descalzo?
¡A los peques les encanta descubrir nuevas sensaciones! Caminar descalzo es la solución ideal para que tu hijo aprenda a caminar.
Sentirá mejor el suelo, ajustará su equilibrio y desarrollará los músculos de sus pies. Eso sí, fuera de casa, para proteger tus pies, opta por zapatos de primeros pasos de bebé, que ofrecen comodidad y libertad respetando el crecimiento natural de los pies.
En Petits Pas de Géant recomendamos que tu hijo use zapatos de bebé barefoot, diseñados para imitar la sensación de caminar descalzo y al mismo tiempo proteger los pies del suelo frío en casa o en el exterior.
Cómo fomentar el aprendizaje de la marcha
Aprender a caminar requiere paciencia, tanto para ti como para tu hijo. Anímalo, aplaude su progreso y déjalo explorar a su propio ritmo. Elige un entorno seguro donde pueda moverse sin riesgos.
¿Cuándo ir al médico si el bebé no camina?
Es natural preguntarse si tu bebé camina lentamente. Aunque cada niño tiene su propio ritmo, ciertas señales pueden indicar que es necesaria una consulta. Observar su desarrollo motor y contactar con un profesional de la salud puede asegurar que todo avanza correctamente.
Señales a tener en cuenta en el desarrollo motor
No hay de qué preocuparse antes de los 18 meses si tu hijo aún no camina. Cada niño sigue su propio camino de desarrollo.
Algunos niños simplemente se toman más tiempo para desarrollar su coordinación y equilibrio.
Si pasada esta edad sigue sin mostrar interés por caminar o tiene dificultades para mantenerse en pie, el asesoramiento profesional podrá aportarte respuestas y, en su caso, consejos adecuados.
¿Qué hacer si el bebé no camina a los 18 meses?
Aunque muchos niños caminan antes de esta edad, algunos pueden tardar más. Si tu hijo no camina a los 18 meses, es recomendable acudir al pediatra o podólogo para asegurarse de que todo está bien.
La importancia del entorno en la adquisición de la marcha
El entorno juega un papel esencial en el aprendizaje de la marcha. Un espacio seguro y estimulante le permite a tu hijo explorar libremente, mientras desarrolla sus habilidades motoras. Las interacciones con usted y sus seres queridos fortalecen su confianza y alientan su progreso.
Crea un espacio seguro y estimulante
Un espacio seguro es fundamental para que tu hijo pueda explorar sin miedo. Recuerda retirar objetos peligrosos y proteger las esquinas de mesas o muebles con la protección adecuada.
También puedes colocar alfombras o cojines en las zonas donde podría caerse para que no se lastime.
El papel de las interacciones sociales en el desarrollo motor
El estímulo y las sonrisas juegan un papel importante en el desarrollo de tu hijo. ¡Estos momentos compartidos contigo fortalecen su confianza y sus ganas de embarcarse en esta gran aventura que es caminar!
Déjanos acompañarle desde sus primeros pasos
Acompañar a tu hijo en sus primeros pasos significa compartir momentos únicos e inolvidables. Estos pasos marcan el inicio de grandes descubrimientos para él… ¡y para ti!
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También damos consejos para elegir la talla adecuada para tu peque, fundamental para la comodidad y la naturalidad de la marcha.