10 errores al comprar calzado respetuoso para los niños - 2ª Parte
En capítulos anteriores...
En la primera parte de este tema hablamos de la importancia de elegir un calzado adaptado a los pies del peque y a su nivel de motricidad. También hablamos de la definición de respetuoso y la relación calidad-precio. ¡¡¡También vimos que el soporte para el tobillo y el soporte para el arco ES UN NO DIRECTO!!
Aún nos quedan varios temas por tratar y más errores que evitar al buscar el calzado adecuado para tu peque… Let's go
6º Error: Pensar que solo gasta una talla
“Mi hijo gasta la…”
Cada vez que oímos/leemos esto, nos tiramos del pelo... ¡No por favor! Es algo que nos hemos acostumbrado a decir, pero que en realidad no tiene sentido.
El mundo del calzado infantil es un mundo aparte, ¡ninguna marca tiene utiliza el mismo tallaje que otra! No existe una talla estándar.
Por lo tanto, ir a la tienda a medir los pies de tu peque con una regleta de plástico o confiar en la talla de otra marca es una bandera roja andante. No hay mejor manera de equivocarse...
En Petits pas de Géant no se puede filtrar por talla, precisamente para evitar este error.
Un padre no puede, por ejemplo, buscar todos los zapatos que tenemos en talla 23. Esto no tendría sentido, porque el 23 de una marca puede quedarle enorme a su hijo, mientras que el 23 de otra le quedaría pequeño.
“¡Pero claro, es muy difícil encontrar la talla adecuada para cada modelo!”
¡No en Petits Pas de Géant! Al contrario, es incluso más fácil porque hemos preparado todo para hacerte la vida más fácil. Para ayudarte a encontrar la talla adecuada, tomamos el tiempo para medir cada uno de los zapatos que vendemos (con una herramienta profesional, la Plus12) para saber la longitud realmente disponible para el pie en el zapato.
Somos tres midiendo zapatos, porque cada uno mide un poco diferente. Así, con tres comprobaciones, ¡seguro que damos con la medida correcta!
Para saber qué talla elegir para tu hijo sólo tienes que mirar la tabla de medidas del modelo que te interesa (disponible en la ficha de cada producto). ¡Hemos calculado todo para ti!
7º Error: Redondear las medidas
¡Encontrar la talla adecuada para tu hijo es cuestión de milímetros! A la hora de tomar medidas de los pies de tu pequeño Gigante, siempre te pediremos que saques las medidas más exactas posibles . ¡No porque nos guste complicaros la vida, sino para evitar que cometáis errores!
Lo sabemos, no es fácil ser exacto cuando el bebé se mueve, cuando no quiere poner el pie en el suelo, cuando le hace cosquillas... por eso tenemos la tentación de redondear las medidas. Pero luego lo que va a pasar es que nos equivoquemos con la talla.
- Si redondeas la longitud al 0,5 más cercano, corres el riesgo de elegir una talla demasiado grande.
- Si redondeamos la longitud de un pie al medio número inferior (0,5) y la del otro pie al medio número superior (0,5), podríamos acabar con un pie en talla 21 y el otro en talla 22.
Lo mismo ocurre con el ancho. Si redondeas las medidas, puede darte un zapato para pies anchos siendo medianos, o un pie fino y otro mediano...
Y al utilizar nuestra herramienta erróneas con estas informaciones, ¡se vuelve loca y no entiende nada!
Las tablas de medidas de los modelos son muy precisos, cada talla está asociada a un rango de medición calculado al milímetro más cercano. El margen necesario en el zapato no es un margen de error.
Encontrará muchas explicaciones sobre los métodos de toma de medidas, consejos y trucos en nuestra página "La talla correcta":
8º Error: elegir zapatos con talonera
Es posible que te encanten unas zapatos con un pequeño tacón que encuentres en las tiendas, porque son monísimas y piensas que no es algo tan grave. Sin embargo, hay varias razones por las que no se deben poner zapatos con contrafuertes a los niños.
De primeras, si ponemos algo debajo del talón de un niño, modifica su centro de gravedad, es decir la manera en que su cuerpo encuentra el equilibrio. Para aquellos que todavía están aprendiendo el equilibrio (incluso a los 4 años), esto realmente no es bueno.
Entonces, su forma de caminar es diferente al llevar contrafuertes. A medida que el cuerpo se inclina hacia adelante, son los tobillos, las rodillas e incluso la espalda los que compensan. ¡Esto causará dolor, que su pequeño cuerpo en evolución no debería experimentar!
Por último, muchas veces este tipo de zapato con tacón pequeño no es flexible o no es lo suficientemente flexible. La suela rígida y gruesa no permite que el niño sienta lo que sucede bajo sus pies.
Esto es lo que debes recordar: ¡necesitas algo plano!
9º Error: Comprar zapatos por adelantado
(y coger una talla por encima sin volver a medir los pies, sin reevaluar la morfología, pensando que le quedará bien)
Como adultos, por supuesto, podemos comprar zapatos con antelación para la próxima temporada. ¡Es fácil, nuestra talla sigue siendo la misma! Los niños, en cambio, crecen muy rápidamente y cambian de talla más o menos rápidamente según su edad.
¿Lo sabías ? En promedio, y dependiendo del ritmo de crecimiento, un niño:
- Entre 1 y 2 años cambia de talla cada 2 a 3 meses
- Entre 2 y 4 años, cada 3 a 4 meses
- Entre 4 y 6 años, cada 4 a 6 meses
- Después de los 6 años, crece de una a dos tallas por año.
Por supuesto, esto dependerá de cada niño, esto es una media. Los picos de crecimiento son aleatorios, no podemos saber con certeza cuándo un niño necesitará cambiar de talla.
Si a principios de año compramos zapatos para primavera/verano eligiendo una talla superior a la actual, podemos encontrarnos en abril con un par que ya nos queda pequeño porque el bebé ha crecido muy rápido.
Por lo tanto, lo de anticiparse es muy arriesgado. Lo mejor es medir sus pies cada mes para asegurarte de que sus zapatos aún le queden bien.
10º Error: Comprarle zapatos de segunda mano
Ya sea un hermano mayor, un primo, un amigo o quien sea, la respuesta siempre será la misma: no se recomienda que un niño use un par de zapatos que ya ha llevado otros pies pequeños.
Los zapatos respetuosos se adaptan a los pies que los usan en varios niveles. Están diseñados para que cada niño sienta que el zapato ha sido creado especialmente para él, y solo para él. Recoger los zapatos de otro niño de la familia, de amigos, o comprar una pareja de segunda mano no es lo mejor.
Se puede hacer, pero bajo ciertas condiciones:
-Que la suela no tenga ningún signo de desgaste.
-Que la plantilla se pueda extraer y cambiar (ya que ha memorizado la forma del pie del primer niño y, también por una cuestión de higiene).
-Que la parte superior/caña del zapato no esté deformada.
-Que se ajuste también a la morfología del niño que los va a usar.
Que la goma no esté dañada ni endurecida.
¡Ahora sí! Damos por finalizada la saga de los errores a evitar a la hora de elegir el calzado de tu peque y ya dejamos de daros la matraca. ¡Esperamos que no se nos haya olvidado nada!
Si aún tienes alguna duda, no dudes en contactarnos a través de nuestro formulario de contacto.